Nuestra experiencia.

Un aspecto fundamental que debíamos abordar en el proceso de creación de nuestra empresa era la elaboración de nuestro currículum vitae, un documento esencial que reflejaría nuestra formación, experiencia y habilidades. Cada uno de nosotros debía dedicar tiempo a diseñar su propio currículum de manera detallada y personalizada, con el fin de presentar de forma clara y precisa nuestras trayectorias profesionales y académicas, así como las competencias que aportaríamos al proyecto. Este paso no solo era necesario para tener una visión más estructurada de nuestras capacidades individuales, sino también para poder demostrar nuestra preparación y compromiso con la empresa.